FRANKFORT, KY – En vísperas de una polémica carrera por el cargo de gobernador entre el actual Andy Beshear y el retador Daniel Cameron, el Centro de Políticas de la Commonwealth (CPC, por sus siglas en inglés) generó controversia con el lanzamiento de una campaña de libertad religiosa llamada «Proteger». A los críticos les preocupa que esto pueda ser un intento de dinero negro para influir en las elecciones de 2023.
La campaña publicitaria, presentada el 5 de junio, tiene como objetivo elevar el estatus de la libertad religiosa como un derecho central en Kentucky, que alega ha sido cuestionado bajo el liderazgo de Beshear. El director ejecutivo del CPC, Richard Nelson, subrayó su deseo de centralidad de la libertad religiosa en la Commonwealth, expresándolo como «mucho más amplio que simplemente adorar un domingo por la mañana».
La campaña plantea preguntas alarmantes sobre la infusión de dinero negro en la política, dada la ambición del PCCh de influir en las elecciones a favor de los candidatos conservadores. Este movimiento, que muchos ven como una crítica directa a las políticas del gobernador Beshear, podría alterar significativamente el curso de la próxima carrera para gobernador.
La campaña cita ejemplos controvertidos para hacer su punto. Nelson mencionó que las iglesias son tratadas con «importancia secundaria» en comparación con los casinos y los centros de aborto. La campaña también destacó el caso de un exdirector del condado de Anderson que, afirma, se vio obligado a referirse a los estudiantes transgénero por los pronombres que eligieron, lo que sugiere que la libertad religiosa estaba en juego.
La intervención del PCCh en esta carrera crucial podría cambiar las reglas del juego. Sin embargo, sus motivos y fuentes de financiación están bajo escrutinio, lo que genera preocupaciones sobre la influencia del dinero oscuro en un proceso democrático. Como organización sin fines de lucro, el CPC no está obligado a revelar a sus donantes, un hecho que ha causado inquietud entre los defensores de la transparencia en la política.
Nelson no respondió a una pregunta enviada por correo electrónico sobre las fuentes de financiación de CPC. Un Formulario 990 del IRS reciente para la organización revela más de $ 475,000 en ingresos durante dos años, pero no identifica contribuyentes específicos.
El lanzamiento de la campaña llega en un momento en que la nación está lidiando con preguntas similares sobre la intersección de la religión y la política, planteando preguntas sobre la libertad religiosa, las libertades civiles y la separación de la iglesia y el estado.
El CPC, que promociona su dedicación a la preservación de «los valores fundamentales de la vida, la libertad religiosa, el matrimonio y la responsabilidad fiscal en la Mancomunidad de Kentucky», ahora se encuentra en el centro de este complejo debate.
Si bien la libertad religiosa sigue siendo un componente vital de nuestra democracia, el temor es que pueda usarse como un garrote político para avanzar en una agenda particular. Esta preocupación se intensifica a la luz de las próximas elecciones y el papel potencialmente influyente que podría desempeñar la campaña “Proteger”.
La oficina del gobernador Beshear no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la campaña.
A medida que se desarrolla esta saga, es evidente que la libertad religiosa, una piedra angular integral de nuestra sociedad, ha sido arrastrada al campo de batalla político, lo que podría sesgar el proceso democrático. Solo el tiempo dirá si estos esfuerzos alterarán la trayectoria de la carrera por el cargo de gobernador de Kentucky.
Foto superior: captura de pantalla del anuncio «Protect» del Commonwealth Policy Center.